Debido a que la API nueva te brinda acceso a la configuración confidencial de la cuenta, es importante mantener tu app segura.
No publiques actualizaciones alfa o beta con una frecuencia superior a la diaria. (Las apps de producción deberían actualizarse incluso con menos frecuencia). Cada actualización implica tiempo, y probablemente dinero, para tus usuarios. Si implementas actualizaciones con demasiada frecuencia, los usuarios comenzarán a ignorarlas o, incluso, desinstalarán el producto.
Por supuesto, si existe un problema grave con tu aplicación, corrígelo.
No permitas que terceros usen las API para publicar en tu cuenta. No uses las API para ofrecer un servicio o una herramienta a los desarrolladores que cree, suba, publique, distribuya o actualice apps en Google Play Store. Esto constituye un incumplimiento de las Condiciones del Servicio de la API de Google Play Developer. Estas acciones pueden ocasionar la suspensión de tu cuenta y la eliminación de tus apps de Google Play Store. Todo lo que se hace en tu cuenta es responsabilidad tuya, y permitir que un tercero la use ponga en riesgo a todos tus usuarios.
Si hay terceros que te ayudan a desarrollar la app o diseñar la ficha de Play Store, no hay problema. Sin embargo, no compartas el nombre de usuario ni la contraseña de la cuenta de desarrollador con esas personas. En su lugar, usa Google Play Console a fin de agregar cuentas de usuario nuevas para esas personas y limitar cuidadosamente los permisos de las cuentas.
Recomendamos no otorgar acceso a terceros a ninguna cuenta de servicio que puedas crear. Te recomendamos que no otorgues acceso a ninguna clave privada en tu cuenta de servicio. Esto te brinda acceso anónimo a tu cuenta, que puede compartirse con cualquier persona.